sábado, noviembre 14, 2015

El reggaetón y la violencia de género.

Pregunto, simplemente pregunto. En un intento de ser menos asertivo y más interrogativo. En este momento prefiero tener buenas preguntas antes que todas las respuestas. ¿Que relación hay entre el reggaetón y la violencia de género? Existe una. Aunque no vamos a caer en la obviedad de A por lo tanto B, y B por lo tanto A. Este estilo de música no genera la violencia contra la mujer. Seguramente, la alienta, justifica, enaltece, pero no es el motor generador. Eso sería como decír que el problema está en otro lado y salir a combatir el incendio hacia la periferia en vez de atacar por el foco central. Como combatir la enfermedad atacando los sintomas unicamente. La mentalidad o ideología se ve en las letras, como la de la primera imagen, que pertenece a Mr. Fox. ¿El habla de sometimiento como si eso fuera común? ¿Está bien someter a alguien según él? Esto más bien parece el razonamiento de un convicto. Más que apología de la violación está yendo un paso más allá y se califica directamente como un violador.
La segunda imagen, letra del reggaetonero Dalmata, considera demente y bellaca a la mujer, de gustos culinarios ciertamente dudosos que sean condicentes con la realidad. Al igual que la tercera imagen, donde hacen de la felación un gusto femenino. A lo cual debemos reconocer que poco satisface una mujer practicarle sexo oral a un hombre, desde el punto de  vista fisiológico digamos. Excepto quizás por ponerle un poco de morbo, pero las mujeres sienten más al ver la reacción del hombre que por el hecho en si.
 Mujeres que no se quieren y que permiten ser mancilladas tanto física como verbalmente. ¿Es lógico que les digamos que no son un objeto? ¿Entienden que significa eso? En la letra de la imagen 4 perteneciente a J-Alvarez, el hombre como enunciador expresa y se identifica como un maniatico. ¿No es entonces una mala combinación? Un violador y la mujer objeto. ¿No son la combinación explosiva para generar la violencia? Un elemento sorpresa alimenta al otro, y a su vez se realimenta en un vicioso feedback.
Como vemos en la imagen 5, la letra de Jiggy Drama, allí expresa que la mujer debe quedarse en ese sitio de sumisa, ante la violacion y no debe ponerse "alzadita". Sin lugar a dobles interpretaciones. La mujer, según Jiggy, debe dejarse abusar. En estos cinco ejemplos, de una campaña llamada "Usa la razón", se hace un llamamiento a las mujeres a escuchar con atención como la representan en las letras del reggaetón. Las preguntas que me hago. ¿El perreo es simplemente un impulso inducido en forma conductista? En el mejor sentido de como Skinner y Watson lo han pensado. ¿Es una forma conductista de controlar al populacho, a la clase baja? ¿Será la idea de algún oscuro poder para mantener entretenido y peleando al pueblo llano? ¿Quizá para que no intenten aspirar a más, a cierta cultura letrada y de mejor nivel? ¿O esta es la expresión de una violencia ya existente? Si es así, es admiración por la violencia de lo que hablan esas letras, no condena. Es alabanza por el abuso y no la censura ante él. El reggaetón no genera violencia pero si la promociona. Están como títeres estos "cantantes", realimentando un sistema enfermo de bajos valores culturales, donde se naturaliza la violencia y el lugar de la mujer se considera (si es que la consideran en algún lugar), muy por debajo del hombre. Si esos consumos culturales continuan siendo expuestos y no discutidos, es muy dudoso que algo cambie en la sociedad latina sobre el lugar de la mujer y la violencia de género.
Fantasias pervertidas de ayer y hoy presentó...

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